Estribillo del himno del centenario de la peregrinación a la Virgen de la Caridad (1919).

"A la Virgen de Udías
viene de corazón
Ruiloba en estos días
fiel a su tradición;

protégenos, Señora,
Madre de Caridad,
contra una mala hora
o peste o mortandad."

Llegamos mis compañeras ,
llegamos con humildad (bis )
a cantar a San Esteban
que esta puesto en el altar ( bis )

Ahora que hemos oído
misa y sermón en el templo (bis )
le cantaremos nosotras
a San Esteban los versos ( bis )

Hagan el favor señores
de retirarse hacia atrás ( bis )
y dejar el corro libre
para los mozos bailar ( bis )

Brilla el sol suenan cohetes
castañuelas y panderos ( bis )
y repican las campanas
con alegría y contento ( bis )

El primer mártir que hubo
fue el glorioso San Esteban ( bis )
que murió apedreado
pidiéndole a Dios clemencia ( bis )

Sus doctrinas fueron santas
como también su humildad ( bis )
y por eso Jesús quiso
la su sangre derramar ( bis )

Gracias a Dios que ha llegado
este deseado día ( bis )
todo el pueblo se ha llenado
de jubilo y alegría ( bis )
y nosotros parroquianos
te alabamos a porfía ( bis )

Todos al santo alabamos
y damos gracias a dios ( bis )
y rogamos que nos llenes
de esperanza paz y unión ( bis )

Hoy en el pueblo de Udías
su clero y autoridad ( bis )
al patrón quieren honrar
con cariño y lealtad ( bis )

Pasamos a saludar
a la justicia de Udías ( bis )
el primero es don Fernando
el alcalde en nuestros días ( bis )

A. D. José Fernández
también hemos de cantar (bis)
que tiene en sus propias manos
la vara de juez de paz ( bis )

Dios le de mucha salud
al que misa celebro ( bis )
a don Daniel de la Cueva
nuestro párroco y pastor ( bis )

Damos infinitas gracias
a los mozos que han bailado ( bis )
que han tenido la bondad
de venir acompañarnos ( bis )

Hay que lirios hay que flores
o hay que lindos bailadores ( bis )
bien vestidos bien calzados
bailando parecen flores ( bis )

Por encima la corona
del que misa celebró ( bis )
paso una paloma blanca
Virgen y Madre de Dios ( bis )

Con esa palma bendita
que tienes en esas manos ( bis )
echamos la bendición
San Esteban que nos vamos ( bis )

Échanos la bendición
que nos vamos ausentar ( bis )
hasta otro año si dios quiere
que volvamos a cantar ( bis )
y si no somos nosotras
otras de nuestra igualdad ( bis)

"Tanto me ha gustado siempre esa romería del Mozuco, que compuse esta trova:"

"Así me gusta el Mozuco
y así quiero yo a Ruiloba,
al verlos, como estos años,
con sus bonitas carrozas.

Ya se han juntado en el barrio
de Liandres y Casasola,
de Tramalón y de Pando,
y El Obispo con su mona.

Ya dan orden de salida,
ya desfilan las carrozas,
subiendo por el Castillo
y divisando a Corona,
y el valle con la Molina
de esa Ruiseñada hermosa.

A la entrada de Canales
tiran cohetes y bombas.

Delante van los chavales
y detrás vienen las mozas,
y un poco más retrasados
los viejos con sus alforjas.

Esa comida que llevan,
debajo de aquellas sombras,
después que vengan de misa,
ha de saberles a gloria.

En el alto de La Hayuela
Tilero baila una jota,
que tocan Bosio y Martín;
y Masio invita a una copa
a Ico, el Portalao,
ese romero con sombra,
con sus abarcas pintadas,
su blusa y su cachiporra,
con ese paraguas que es
la alegría de Ruiloba.

Ya desfilan para el Barrio,
ya se marchan las carrozas,
unos por Mano los Bueis,
otros bajan por Valoria,
a saludar al Mozuco
y aquella Virgen Señora
que con los brazos abiertos
espera a los de Ruiloba.

Entran ya para la iglesia,
empieza la ceremonia,
las viejas ponen el velo,
los viejos quitan la gorra,
y las mozas sus pañoletas,
aquel recuerdo de novia.

¿Donde estás, María Cruz,
el alma de aquellas coplas?.

Terminada ya la misa,
esa danza de Ruiloba,
que heredaron de los celtas,
griegos, fenicios o Roma.

Que no digan en Cabezón
que si es la baila de lbio.

Acuérdese usted, señora,
cuando el año veintinueve
han triunfado en Barcelona
y Cabezón no tenía
ni bombo ni caracola.

Ya terminada la danza
se marchan los de Ruiloba,
unos por Mano los Bueis,
otros suben por Valoria,
donde esos dieciocho robles,
a comer bajo su sombra,
en esas mesas que ha puesto
el Patrimonio o Icona.

Que sean tanto de Udías
como tanto de Ruiloba,
que allí, un día del Mozuco,
puedes encontrar tu novia,
como la encontró Atilano
y le salió muy hermosa."

La Ultima Trova
Indalecio Zaballa "Masio" Antonio Zavala

Sobre los mineros de Udías Manuel Llano escribió:

"La mina era el complemento de la labranza o viceversa. Y con estas dos ruedas caminaba el valle sencillamente, su paso a paso discreto, sin tambaleos, sintiendo los silbos de las maquinucas de la mina y los golpes secos en la mies... [...] Y el minero traia a la mies polvo rojizo de las galerias negras. Unas horas con el apero agrícola y otras con el candil y la piqueta, horadando rocas y arcillas."

"La mayoria de los afanes estaban puestos en aquellas peñas del oriente del valle llenas de replanos, de tuneles, de ajetreos fabriles, de ruidos de hierros y dinamitas. Pero un dia la cuenca se quedó silenciosa. Los hombres permanecieron el los pueblecitos y la mina fue como un desierto de lastras, como un aticipo de ruinas. [...] El último jornal fue un aviso de miseria. Aquella puerta se cerraba. Y cuando se cierran las puertas del trabajo, nada más queda la misericordia o la esperanza del camino. Caminatas de los pobres mineros por las carreteras pensando quizá en la intemperancia de la civilización, que les echa de sus casas a correr la triste, la amarga aventura de la mendicidad."